Héroes Peruanos
Miguel Grau Seminario (Piura, Perú, 27 de julio de 1834-Punta Angamos, Mejillones, Bolivia, 8 de octubre de 1879) fue un marino militar peruano, y almirante de la Marina de Guerra del Perú. Durante la guerra del Pacífico, comandó el monitor Huáscar y mantuvo a raya a la escuadra chilena durante cinco meses, sucumbiendo finalmente de manera heroica en el combate naval de Angamos, enfrentando a fuerzas superiores. Es considerado el héroe máximo de la nación peruana. Su generosidad para con el enemigo en el campo de batalla le valió el apelativo de El Caballero de los Mares. Ha sido también elegido como El Peruano del Milenio.
Elías Aguirre Romero

Francisco Bolognesi

Pedro Ruiz Gallo

de Chiclayo donde se empezó a desempeñar como ayudante de relojero, afición que le interesaría por el resto de su vida.Desde su niñez Pedro Ruiz Gallo se sintió atraído por la mecánica pero movido por su también vocación militar se trasladó a Lima a la edad de 15 años para enlistarse en el ejército sentando plaza de cadete en 1848, por sus méritos y reconocida inteligencia rápidamente ascendió en la carrera de las armas siendo que en 1855 ya ostentaba grado de capitán desempeñándose como ayudante en el prefectura del departamento de Amazonas lugar donde realizó muchas exploraciones y estudios en la todavía desconocida selva peruana. Durante este periodo también incursionó en la medicina logrando el descubrimiento del fluido vacuno contra la viruela con el cual logró crear una eficiente vacuna. Durante su estancia en Chachapoyas construyó un reloj público que donó a esa ciudad. En 1865 fue ascendido a Mayor Graduado y al iniciarse ese mismo año la revolución del general Mariano Ignacio Prado, y que desembocaría más tarde en la guerra contra España, se unió al ejército restaurador que marchó a Lima y derrocó al presidente Pezet, para luego combatir en el glorioso combate del 2 de mayo ante la escuadra española tras esta acción de eterna memoria en la historia republicana ascendió a Teniente Coronel.
Túpac Amaru II

María Parado de Bellido

Andrés Avelino Cáceres

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